Mostrando entradas con la etiqueta Shakespeare. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Shakespeare. Mostrar todas las entradas

lunes, 16 de marzo de 2020

CONFINADOS PERO FELICES



Estoy convencido que el sistema de internet, o como quiera que se diga en pretencioso, peta en cualquier momento.

No puede ser que todo el que no tenga que ir a trabajar, e incluso trabajando, esté conectado a la red de redes, y ésta no sufra sobrecarga, por lo menos de chorradas, porque no nos va a dar a todos, de un momento a otro, para elucubrar como si fuéramos un personaje de Shakespeare en busca de honra, o de país, o de ambas cosas.

Por de pronto yo ya he comprado por la red, para entrar en situación de la época que estamos atravesando, un disfraz de preso, de esos de los de toda la vida, con rayas blancas y negras. No he pedido la bola, no, aunque me la podían mandar también, con cadenas y grilletes, todo incluido, porque, la verdad, la veía muy pequeña para todo un coronavirus.

Siempre lo he dicho, se puede creer en cualquier cosa, por ejemplo en Star Wars, o para los de mi "degeneración", en “La guerra de las galaxias”, siempre que se cuiden los detalles, y a mi la bolita de preso no me parecía nada seria. Incluso, bien pensado, ya de preso me puedo unir a un pedazo de papel, a una factura, o a una hipoteca, que eso sí que une de por vida, a la tuya y a la de tus hijos.

Se nos ha dicho que tenemos que estar así, confinados en nuestras casas, un mínimo de dos semanas, pero este vecino del mundo está convencido que en dos semanas no se le da la vuelta a esto. Comenzamos por las noches aplaudiendo al sistema de salud, pero no se sabe cómo acabaremos, incluso intentando prender fuego a nuestra sombra...

Nos va a venir la primavera y con ella los deseos de todo, encerrados y más secos que la mojama. Pero eso sí, ya puestos, confinados pero felices. Mojama de atún con almendras, que alguna almendrita ya he visto yo por aquí. 

Como ya he dicho antes, cuidando siempre los detalles…

*FOTO: DE LA RED

sábado, 11 de febrero de 2017

GRAGEAS DE YOUTUBE PARA DULCIFICAR EL ÁNIMO


En general la mayoría de las “cosas” no son ni buenas ni malas, sino depende de la manera en que se aplican.

Mucho se habla, como dirían algunos, del “internete” y de la cantidad de problemas que ha podido traer. Pero, por otro lado, no se habla de las familias que permanecen unidas, pese a la distancia, con aplicaciones como “Skype”.

A medida que vamos viviendo, vamos aprendiendo a sobrevivir, e incluso nos convertimos en auto-psicólogos. Por eso, en momentos que los pijos denominarían “down” este vecino del mundo se aplica “medicinas youtuber”.  Odio los anglicismos, aunque este vecino se defienda en inglés (y, no, con el inglés), porque en castellano se puede expresar todo. Otro asunto es que tardes más tiempo en explicarte, pero lo mismo que esperamos para que nos sirvan una caña bien tirada, podemos esperar  dos segundos más para recibir la información completa en el idioma de Cervantes, y no en el de Shakespeare, que siempre será la competencia.

En momentos como el de hoy, con dos congresos políticos (a la izquierda y a la derecha), y con un bagaje de información y de experiencias en el que uno está más allá del gorro, este vecino se toma unas grageas (hace mucho que no utilizaba esta palabra, que me imagino ya estará en decadencia, pero que denota, en mi caso al usarla, un cierto grado de nostalgia) de Youtube (siento no poder traducirlo en castellano, pero es el nombre de una aplicación, ya perdonarán los que me estaban esperando desde el párrafo anterior).

Este vecino del mundo es un amante de la música, y siempre se ha imaginado que un mundo en el que todos bailaran, como en los grandes musicales del teatro y del cine, siempre será mejor; y además, este vecino del mundo, sabría bailar (una de sus mayores frustraciones), porque en los musicales todos bailan, y si no saben, aprenden en dos o tres compases.

Aunque muchas veces utilizo/consumo actuaciones de programas como “Got talent”, en el que a modo de "balcón de la esperanza", personas anónimas te pueden llegar a sorprender con enorme talento, en días como el de hoy me decanto por ver “Flash mob” (acto organizado por un grupo de personas que se reúne de repente en un lugar público, se supone que previamente han quedado bien por móvil o internet, y realiza algo inusual, normalmente tocar un instrumento, o bailar, y al finalizar se dispersa rápidamente). Algo así como lo que realiza un “grafitero”, pero escrito musicalmente y bailado, en lugar de en una pared, en un espacio público.

Aunque los dos ejemplos que voy a poner hoy llevan mucho tiempo en la red, y más de uno de mis lectores, los habrá degustado ya) creo que se merecen un reconocimiento, porque se nota que ambos han necesitado de mucho tiempo de preparación para que tras unos pocos minutos se los lleve el silencio del tiempo.

El primero tiene lugar en Bilbao, y lo realiza un padre con un hijo con una enfermedad neurodegenerativa, para obtener fondos para su fundación (https://www.youtube.com/watch?v=utyhx5pn4b8),  y el segundo “un gran musical” en la estación de tren de Amberes (https://www.youtube.com/watch?v=bQLCZOG202k).


La administración de este tipo de medicina vendría bien a la mayoría de nosotros, sin aparentes contraindicaciones, a no ser que alguien aprecie como “nocivo”, el dulcificar un poco sus ánimos, por temor, quizás, a que “su enemigo” sea ciego o sordo, y le traiga al pairo todo lo dicho anteriormente.


*VIDEOS: DE LA RED

viernes, 13 de septiembre de 2013

LIVING BY THE FACE

He estado fuera de Donosti algo más de una semana, y al volver, el buzón estaba aparentemente de buen ver: tres folletos ofreciéndome el oro y el moro, y cuatro cartas, dos para mí y otros dos para dos vecinas, que en el argot de la lotería nacional no me hubiera tocado ni la pedrea (ninguno de los dos apellidos de las susodichas eran ni remotamente parecidos a los míos), vamos que el cartero, o la cartera, debió de decir eso de “te ha tocado”, y este vecino del mundo, al que tampoco le gustaría que se perdieran cartas dirigidas a él, las ha colocado en sus respectivos lugares.
No, si eso no importa, el problema es que si de trescientos sesenta y cinco días que tiene un año, te ocurre eso unos dos cientos, que puede ser, al final ocurre que estás trabajando para Correos, como diría un inglés, by the face, y eso es tener mucha “face” por parte del operario de turno. Es una especie de trabajo “franquiciado”, y las franquicias somos los que al final deshacemos el entuerto creado por el currito de turno, que si le preguntas dirá que su nomina no llega ni a los novecientos euros, y que está más quemado que “la pipa de un indio”. Y es que razones hay para todos los gustos.
Como las dadas ayer por el primer edil de la villa y corte, Señora Botella, que no sé si le da mucho a su apellido, pero de vez en cuando suele decir cosas muy graciosas, aunque lo triste es que lo dice sin querer. Ayer habló por primera vez con la prensa desde las calabazas recibidas por el Comité Olímpico, y ha confirmado que para el 2024 Madrid no se presentará candidata, "Creo que en este momento la carrera olímpica ya nos ha proporcionado todos los beneficios que podemos esperar de ella en los próximos años. Creo, por tanto, que Madrid no debe buscar la celebración de los Juegos del año 2024", ha dicho la regidora madrileña.
Este vecino se ha debido de perder algo, porque todavía, después de bastantes horas de haber oído la citada frasecita, se está preguntando cuáles y dónde están los beneficios de la carrera olímpica. Me imagino que será el haber alegrado un poco el patio europeo con el cachondeo que todavía se estarán pegando a cuenta de las arcas madrileñas, y por ende de las nacionales. Eso sí, ahora toda Europa, e incluso diría yo que todo el mundo, ya sabe decir “café con leche” en perfecto castellano.
Y es que tanto el funcionario de correos anteriormente mencionado, como la Señora Botella, tienen algo en común, y que en el idioma Shakespeare-cheli sería algo así como living by the face (viviendo por la cara), que enfada menos a este vecino, ya que ellos reparten el juego y nosotros tenemos que sacar las castañas del fuego.

*FOTO: DE LA RED